Comprar un automóvil usado  

Si usted está comprando un automóvil usado en un concesionario en la ciudad de Nueva York, asegúrese de que el concesionario tenga licencia. El Departamento de Asuntos del Consumidor de la Ciudad de Nueva York emite estas licencias. También debe consultar el historial de querellas en www.nyc.gov/consumers. 

Los concesionarios de automóviles usados ​​deben obedecer ciertas leyes federales y estatales. Por ejemplo, el concesionario debe certificar por escrito que el automóvil está en buenas condiciones de manejo. Debe certificar que tiene todos los equipos de seguridad necesarios y los controles de emisiones. El concesionario también debe haber inspeccionado el automóvil dentro de los 30 días antes de la compra. Usted debería probar el auto e inspeccionarlo. Puede pagarle a un mecánico independiente para que revise el automóvil antes de comprarlo. Si el concesionario se niega a permitirle llevar el automóvil a un mecánico, debe considerar no comprarlo. 

Otra cosa que puede hacer es verificar el historial del vehículo para ver si hay retiros de seguridad activos por el automóvil o sus partes. También puede obtener un historial del vehículo en www.vehiclehistory.gov. Puede ir a www.safercar.gov y buscar por el número de chasis o número de bastidor (VIN, por sus siglas en inglés) para ver si el automóvil ha sido retirado del mercado o si existe alguna denuncia de seguridad. Si el automóvil tiene un retiro de mercado por un defecto de seguridad, puede solicitar que el concesionario lo repare o pague las reparaciones, incluso si se enteró del retiro después de que sacó el vehículo del concesionario. Si el concesionario se niega a reparar el vehículo o pagar las reparaciones, usted puede presentar una querella ante el Departamento de Asuntos del Consumidor. 

Si un concesionario lo está presionando para que compre un automóvil, debe considerar retirarse de la negociación. En Nueva York, no hay un período de “enfriamiento” (período para cancelar la compra del auto). Algunos concesionarios pueden decirle que tiene tres días para cambiar de opinión. Esto no es verdad. En la ciudad de Nueva York, tiene 48 horas para revisar un contrato antes de firmarlo mientras el concesionario se queda con el automóvil. 

El concesionario puede intentar convencerlo de que compre el automóvil según el presupuesto que usted estipule. Esta no es una buena estrategia de negociación. El concesionario solo ajustará los números para que los pagos mensuales parezcan caer dentro su presupuesto, pero al final puede terminar pagando más por el auto. Usted quiere pagar el precio más bajo a la tasa de interés más baja. También quiere tener el número más bajo de pagos mensuales que sea posible. 

Aquí hay algunos consejos para negociar un contrato de auto con un concesionario: 

• no firme a menos que entienda todos los términos del contrato; 

• no le entregue dinero al concesionario antes de firmar el contrato; 
• no firme un contrato en blanco; 
• asegúrese de que el vendedor no haya agregado ningún servicio o tarifa que usted no haya aceptado; 
• si hay alguna casilla en blanco, táchela para que el vendedor no pueda llenarla más tarde; 
• asegúrese de obtener copias de todo lo que firme antes de irse del concesionario y guarde las copias para sus archivos; y 

• si negoció la venta en español y va a financiar el auto, el contrato escrito también debe estar en español. 

También puede comprar un automóvil usado de un vendedor privado. Por lo general, pagará menos por el mismo vehículo si compra a un vendedor privado, pero hay algunas desventajas. Los vendedores privados generalmente no ofrecen garantías. Las leyes estatales de limón no cubrirán el vehículo si está defectuoso. Tampoco puede acudir al DMV u otra agencia del consumidor para quejarse de la venta. Debe resolver el problema con el vendedor, lo que puede implicar presentar una demanda. Dependiendo de cuánto pagó por el automóvil, puede que no valga la pena contratar a un abogado. Los servicios de un abogado pueden costar más que el valor del automóvil. Además, si pagó menos de $5,000 por el automóvil, es posible que deba presentar una demanda en el tribunal de reclamos menores. 

Cuando compre a un vendedor privado, lea con cuidado el título. Asegúrese de que la persona que vende el auto sea la misma persona que está nombrada en el título. De lo contrario, puede estar comprando un vehículo robado o comprando a una persona que no tiene el título libre y claro. Además, puede haber un gravamen sobre el título que usted tendrá que pagar para obtener un título claro. 

Editores legales: David Kassell y Mark Grossman, mayo 2018